Más de 60 reclusos han muerto de hambre y sed en cárceles de Haití

Al menos ocho presos han muerto de hambre la  semana pasada en la prisión de Les Cayes, en Haití, después de que el centro se quedara sin alimentos hace dos meses. Estos fallecimientos se suman a otros decesos que se han producido en circunstancias análogas a lo largo de este año en el país, sumando las de 60 los fallecidos.

El hambre, la falta de agua y el elevado calor contribuyeron a la muerte de los reclusos que esta semana se han reportado en la citada cárcel, según sostuvo este jueves el comisario de gobierno de Le Cayes, Ronald Richemond.

Richemond instó al Gobierno de Haití a tomar las medidas necesarias para encontrar una solución a la crisis de alimentos, agua y medicamentos en las cárceles.

El sistema penitenciario de Haití, con una ocupación de las celdas que supera el 280 % de su capacidad, enfrenta una grave crisis para proporcionar agua y alimento a su población reclusa. Además, el 83 % de los presos se encuentra en prisión preventiva y en ocasiones puede pasar una década hasta su primera vista ante un juez.

Falta de fondos

Se alega que los fondos gubernamentales son insuficientes, lo que ha agravado paulatinamente el problema hasta llegar a la situación actual. Según un informe de la Oficina Integrada de las Naciones Unidas en Haití, publicado la semana pasada, tan solo entre enero y abril se registraron 54 muertes relacionadas con la desnutrición en los centros penitenciarios del país.

Aunque legalmente las cárceles están obligadas a proporcionar a los reclusos agua y dos comidas al día, normalmente consistentes en gachas y arroz con pescado o carne, durante el último periodo los presos han dependido de la ayuda de familiares y amigos.